El Malbec (Parte II)

Este próximo 17 de abril se celebra el día mundial del Malbec.  Esta cepa de origen francés fue introducida en Argentina por Michel Pouget en 1853 y desde entonces se ha convertido en el varietal bandera de dicho país. 

Esta cepa fue redescubierta a finales del siglo XX en Argentina, hallando en ella grandes posibilidades de elaborar vinos de calidad, con lo cual se convirtió en la cepa más plantada en dicho territorio.  A partir de principios del siglo XXI, Argentina empezó a exportar en forma consistente los vinos hechos con esta cepa a todo el mundo.

Los racimos de malbec argentino son diferentes al malbec de origen francés, lo cual sugiere que el argentino proviene de clones que fueron extintos en Francia por la epidemia de filoxera de finales del siglo XIX y por la helada de 1956.  De la misma manera, el clima austral, con una exposición al sol mayor, les permite a estas vides ser más afrutadas. 

El día mundial del malbec fue establecido en 2011, y con ello se quiere recordar la fecha en la cual se le encomienda a Pouget traer a territorio argentino cepas de origen francés.

La región de mayor producción de malbec es Mendoza, la cual también es la provincia de mayor producción de vinos en Argentina.

El malbec Lujan de Cuyo es la primera DOC de Argentina, otorgada en 1991.  Las denominaciones de origen controlado identifican a los productos de un lugar geográfico determinado, producidos bajo ciertas especificaciones, con lo cual se garantiza la calidad del producto, de esta manera se identifican productos propios de una región, con personalidad definida. 

En conclusión cuando se está frente a un vino fabricado con uvas malbec, se está frente a un vino oscuro, con aromas a frutos rojos, ciruelas pasas y pimienta negra que al pasar por barrica adquiere aromas a chocolate y notas torrefactas.  Según Wines Of Argentina, los malbec jóvenes deben consumirse dentro de los 2 o 3 años después de su vinificación y los malbec con añejamiento en barrica, hasta unos 10 años. 

Simplemente nos queda brindar porque este inmigrante francés en suelo argentino siga dando maravillosos productos. 

¡Salud!